Declaración Universal de los Derechos de Dios

ART. 1 Dios tiene pleno derecho sobre el hombre creado a Su Imagen y Semejanza, para que dichas criaturas le rindan homenaje de adoración, gratitud, alabanza y gloria que le son debidos.

ART. 2 Dios tiene derecho a nuestro total y absoluto sometimiento de índole personal y social a Sus Santos Mandamientos, de los cuales pedirá cuenta estricta, como Juez Supremo de todos los hombres.

ART. 3 Dios tiene derecho al total y absoluto sometimiento de nuestras leyes humanas a Su Ley Eterna, como fundamento esencial de aquéllas, sin la cual el derecho dejaría de existir.

ART. 4 Dios tiene derecho a ser reconocido por todas las naciones del mundo como Único Soberano y Supremo Juez de todos los hombres.

ART. 5 Dios tiene derecho a que los gobernantes de todas las naciones legislen y promulguen leyes que estén en perfecta armonía con la Ley Eterna.

ART. 6 Dios tiene derecho a que se respete la vida humana en todas sus formas.

ART. 7 Dios tiene derecho a que Su Santísimo Nombre no se suprima de Constitución Política alguna (ni que se le ponga en los últimos renglones del preámbulo).

ART. 8 Dios tiene derecho a que se respeten los días festivos destinados a Su Culto Público.

ART. 9 Dios tiene derecho a que se acate y se respete a la Santa Madre Iglesia Católica y Apostólica, fundada por Su Único Hijo Jesucristo.

ART. 10 Dios tiene derecho a que se le adore en la Sagrada Eucaristía, en la que está presente con Su Cuerpo, Sangre, Alma y Divinidad.

ART. 11 Dios tiene derecho a que no se desacralicen sus Templos ni se disponga de sus bienes.

ART. 12 Dios tiene derecho a que no se enseñen doctrinas falsas que ofendan Su Divinidad.

ART. 13 Dios tiene derecho a que se prohíba la libertad de cultos, por cuanto que Él es el Único Dios Verdadero en Tres Personas: Padre, Hijo y Espíritu Santo.

ART. 14 Dios tiene derecho a que como Fuente Suprema de toda autoridad, que sus hijos impidan la libertad para ofender Su Divina Majestad, sea de palabra o por escrito.

ART. 15 Dios tiene derecho a que se prohíban los sacrilegios y profanaciones de sus Templos.

ART. 16 Dios tiene derecho a que se prohíban injurias a Su Divina Majestad, así como a la Santísima Virgen y contra los santos, mediante películas blasfemas y libros heréticos.

ART. 17 Dios tiene derecho a que se hagan manifestaciones públicas de adoración, reparación y desagravio por tantas ofensas recibidas.

ART. 18 Dios tiene derecho a que sus criaturas protesten ante las autoridades contra el divorcio, matrimonio civil, unión libre, aborto, exhibición de películas blasfemas, pornografía y demás formas de corrupción que existen hoy en día en la sociedad.

ART. 19 Dios tiene derecho a que los padres de familia e instituciones educativas enseñen el Catecismo de la Doctrina Cristiana.

ART. 20 Dios tiene derecho a que se mantenga la dignidad de la persona humana creada a Su Imagen y Semejanza, impidiendo la depravación mediante programas de televisión inmorales, periódicos, revistas, clonación, manipulación genética y demás actos tendientes a manipular en cualquiera de sus formas la vida humana para cualquier fin.

ART. 21 Dios tiene derecho a establecer en la tierra sobre todos y sobre todo el Reinado Social de Su Hijo Jesucristo, y que por cierto ya está a las puertas.

ART. 22 Dios tiene derecho a premiar a los hombres de buena voluntad que con amor cumplen Sus Mandamientos.

ART. 23 Dios tiene derecho a castigar a los hombres materialistas, inmorales, depravados, enemigos de lo bueno, amadores de los placeres, apóstatas, herejes, injustos, blasfemos, acumuladores de riqueza con el sudor del prójimo; en suma, quienes desobedecen Sus Santos Mandamientos y quienes legislan en contra de sus Leyes Divinas, fuente de todo derecho. Asimismo, Dios tiene derecho a permitir que haya en la tierra guerra, peste, enfermedades, gobiernos injustos que esclavicen, desastres, terremotos, inundaciones, maremotos, erupciones volcánicas, muertes violentas, etc. con objeto de que el hombre vuelva a Él y esté siempre preparado con santo temor cumpliendo Sus Leyes.